Entre las causas del éxito de la autora Elisabet Benavent, y particularmente de Valeria, la serie de españa inspirada en las novelas, es que charla del deseo y del exitación sexual —que detalla abiertamente— desde el criterio femenino. Esta visión, aparte de sus diálogos diligentes y entretenidos, provoca que sus lectoras conecten de forma rápida con los individuos y inconvenientes en el lote sexual y afectivo. No obstante, para la mayor parte de las mujeres, el sexo no es un tema de charla frecuente entre amigas, como sucede en la serie de Valeria, o si lo es, solo con las mucho más íntimas y con algunas reservas, si bien en nivel popular y en la vida diaria se hagan muchas gracietas y alusiones, directas y también indirectas, de manera continua.
De ahí que, y asimismo por causas culturales y educativas, en cuestión de sexualidad con frecuencia falta información, y entender qué nos genera o no nos genera exitación es algo que se marcha aprendiendo y conociendo con el paso del tiempo , las diferentes parejas sexuales y las vivencias.
Para bastante gente la pesadilla donde se convirtió mi vida para sentirme fea, se soluciona con un “¡no sea boba!” o un “¡ame como es!”. En mis manos está continuar adelante.
Por Pepper
Hace unos días en mi trabajo hicieron unos vídeos para conmemorar una fecha esencial en temas de salud. Mis compañeros le pasaron cámara en mano recorriendo la compañía, realizando cuestiones a quienes se les cruzaran por la frente. En el sitio donde trabajo esto sucede habitualmente y toda vez que lo hacen trato de escaparme por no ser entrevistada.
¿Cuáles son las probables resoluciones?
Últimamente, así como comunicaba The Guardian, la diseñadora web Kelsey Bressler solicitó fotografías de sus penes a sus fieles en Twitter. No tenía que ver con ninguna broma. La diseñadora está construyendo una versión beta de un filtro que dejaría interceptar el 95% de las fotografía de contenido sexual –específicamente, de pene– que lleguen por mensaje privado y remover y denegar quien las manda, lo que evitaría a muchas mujeres varias sorpresas desapacibles en el momento del café. El filtro, todavía desarrollandose, fué entrenado con imágenes de cine porno y en esta novedosa etapa ha de ser testado con fotografías reales.
Bressler busca activamente una solución a un inconveniente que padecen muchas mujeres y al que no se le da bastante relevancia desde los campos tecnológicos: que visto que no sea frente a frente no quiere decir que no sea acoso, y que tener herramientas que dejen silenciar y denegar a quien mande este género de contenido no impide que muchas mujeres deban ver el contenido primeramente.
Wey, unas de las expresiones mucho más utilizadas en México
Entre todas y cada una de las expresiones mexicanas wey (asimismo güey, we…) pertence a las más habituales en todos y cada uno de los contextos sociales. Pienso que no hay mexicano que no le haya pronunciado cuando menos una vez en la vida -probablemente van a ser cientos, miles-. Según la Academia Mexicana de la Lengua, esta expresión mexicana es una deformación del toro. Otros aseguran que procede de la expresión de origen náhuatl «uey o huey», lo que es grande. Otros arguyen que esta expresión informal es del pasado siglo y podría referirse a un hombre engañado por una mujer, vamos, a un cornudo.
Se encuentra dentro de las oraciones mucho más propias de México. El concepto de no máculas es afín a «no mamas» pero algo mucho más fino. En castellano (España) sería el semejante a la expresión «no jodas».
