Existen muchas preparaciones de aletas de pollo, esta para mí se encuentra dentro de las mucho más ricas, veloces y simples que hay. Transporta ajos, vino, unas gotas de jugo de limón y yerbas, le aportan bastante gusto y un toque aromático.
La técnica es realmente simple, se ponen a sofreír las aletas con los ajos, yerbas, sal y pimienta hasta el momento en que estén bien doradas. Después se tiene dentro el vino y con asistencia de una espátula, va despegando los jugos que ha soltado el pollo y que quedaron adheridos en el fondo de la sartén (deglasar) que es donde está toda la substancia.
Sugerencia para acompañar el pollo al ajo:
Emplea el vino blanco Señorío de Ondas para este plato y un sinfín de recetas mucho más. Le aportará unos matices aromatizados idóneos.
Consejos para un pollo en el ajo de ajo de semilla
- Si te queda un tanto seco, siempre y en todo momento puedes añadir a tu pollo al ajo en salsa algo de caldo de pollo aparte del vino blanco que transporta la receta. Si bien en un caso así le aseguro que si prosigues la receta pasito a pasito te va a quedar especial.
- Así como ven, el pollo va sin piel salvo las aletas. Si le da lo mismo, dejaría un tanto mucho más de fritura a fin de que la piel del pollo quede lo mucho más crocante viable, la grasa que soltará a la salsa asimismo va a dar mucho más gusto.
- Existe quien pasa el pollo por harina antes de freírlo para sellar el pollo, pero en mi caso pienso que no es requisito, solo lograremos que absorba aún mucho más aceite.
- El toque del vinagre, este punto ácido le va excelente pero es opcional. Se agregaría en el final de todo, al finalizar de guisar el pollo, un chorro solo. No me seas valientes.
- La guarnición para acompañar este plato puede ser una fácil ensalada mezclada. Prácticamente por el tema de equilibrar el plato. Pero el pollo en el ajo solicita a voces unas patatas fritas, patatas panadera o patatas al pobre, ¿no cree? Otras guarniciones fáciles serían unos champiñones guisado con guisantes, arroz blanco o un puré de patatas. Las patatas en el microondas que hemos listo ahora múltiples ocasiones en el blog le van asimismo como anillo al dedo. Un concepto de acompañamiento sin solamente grasa, una aceptable opción.
De qué manera llevar a cabo el pollo en el amamanto
- La primera cosa que hacemos al obtener el pollo es solicitarle al carnicero que nos lo trocee. Ahora en el hogar limpiamos bien los trozos de restos de grasa y retiramos la piel salvo las aletas. Remover la piel es opcional, pero creo que añade al plato un exceso de grasa superflua. Salpimentamos los trozos levemente.
- En una olla ancha ponemos a calentar abundante aceite de oliva y echamos los ajos sin mondar. Los cocinamos a fuego medio, estando atentos de que no se quemen. La iniciativa es que queden caramelizados y sirvan de aromatizante de nuestro aceite. En el momento en que observamos que están blandos tras unos 5 minutos, retiramos y reservamos.
- Agregamos los trozos de pollo a la olla con el aceite aromatizado de los ajos, adjuntado con el papel de laurel, la rama de romero y el tomillo.
- El pollo debe quedar bien frito, lo que nos va a llevar unos 15 a 20 minutos cuando menos. Hemos de estar atentos de ofrecerle la vuelta a los trozos ocasionalmente para procurar que quede tostadito por todos lados. No se habla sencillamente de dorarlo y sellarlo como en el momento en que lo elaboramos para un guiso. Lo que deseamos es que el pollo quede a la perfección cocinado y tierno por la parte interior y tostadito por fuera.
- En el momento en que observamos que nuestra carne está prácticamente lista retiramos el exceso de aceite. Agregamos nuevamente los ajos que disponemos reservados y agregamos el vino. Seguimos cocinando la carne hasta el momento en que el vino se haya achicado prácticamente completamente.
- Si no disponemos vino de Jerez tenemos la posibilidad de usar con perfección algún otro vino blanco de calidad que tengamos por casa. Un Albariño, un Godello… el Jerez le da un toque especial, pero con alguno de ellos va a quedar estupendamente. Servimos calentito a la mesa con algo de perejil picado por arriba o cilantro. Solo nos queda gozar de este genuino «platazo».
- Echar algo de la salsa que va a quedar en la olla por arriba. No se olvide de un óptimo trozo de pan para evaluar esta salsa de pollo, vino y ajo. Exquisito.
Les animo a que lo prueben en el hogar, una receta de mi madre. Puede ver todas y cada una las fotografías del pasito a pasito de este pollo al allillo en este álbum.