De esta manera que se puede llevar a cabo con los senos, asimismo puedes elaborar los muslos de pollo con un muy, muy rico gusto con piña para chupetearte los dedos.
Elaboración
Salpimentamos los muslos y los rebozamos por harina. Los marcamos con aceite fuerte en una olla. Los reservamos.
En este aceite freímos la cebolla y el ajo, y en el momento en que la cebolla esté transparente le agregamos el vino, el vinagre y la cucharada de harina, y lo dejamos unos 2 minutos a fin de que reduzca.
Preparación de Pollo al Horno con Piña:
- Vamos a precisaros de qué forma elaborar un pollo al horno con piña, una receta que si en algún momento probaste te sorprenderá por su gusto. Empleando un pollo de buen tamaño vas a poder ser útil tres o 4 comensales, en tanto que acompañaremos el pollo con una guarnición de patatas para acompañar la piña.
- Si tienes un mayor número de comensales puedes elaborar 2 pollos y acrecentar las proporciones del resto de elementos precisos. Comencemos ahora con la receta pasito a pasito.
- La primera cosa que vamos a hacer va a ser dejar el pollo limpio, tanto por fuera como por la parte interior, quitándole los restos que tuviese y pasándolo por agua bajo el grifo. Una vez lo hayamos limpiado bien lo dejamos chorrear o secarlo, para lograr salpimentarlo al gusto, sin olvidar su interior. Al tiempo que lo reservamos para después mondar 2 patatas para cortarlas en rodajas para conformar la guarnición, con lo que las cortamos con un espesor de un centímetro y medio como máximo, a fin de que queden bien fabricadas.
- Las ponemos sobre una bandeja de horno, engrasada con algo de aceite de oliva, y una vez las contamos formando una base organizada, las salamos un tanto y echamos un chorrito de aceite por arriba. Sobre ellas vamos a poner tres o 4 rodajas de piña, de esta forma sea natural o piña de lata, mucho más ya que sea piña en su jugo y no en almíbar. Tenemos la posibilidad de ponerlas enteras o troceadas, cuanto mucho más nos agrade. Por último ponemos el pollo salpimentado sobre la guarnición y ponemos a precalentar el horno a doscientos grados.
- Mientras que el horno se excita hasta la temperatura deseada prepararemos un aliño para el pollo, lo que vamos a hacer batiendo en un vaso capaz para batidora los cien ml de aceite de oliva virgen, unos doscientos ml del jugo de piña de la lata, o jugo de piña si nos encontramos empleando piña natural, y aparte de esto agregamos 2 o 3 rodajas de piña. Lo batimos lo más bien que se pueda hasta dejarlo mezclado y untaremos todo el pollo con este aliño, tanto por fuera como por la parte interior, y volcamos un tanto mucho más sobre las patatas a fin de que tomen su gusto en todo el horneado
- Con el horno ahora a doscientos grados ponemos la bandeja con todos los elementos y dejamos hornear sobre unos sesenta o setenta minutos precisamente, tiempo que mudar entre un horno y otro, además de influir el tamaño del pollo usado precisamente lo mismo.
- Cocinamos hasta el día de hoy en que el pollo quede bien doradito y le ofrecemos la vuelta para dejarlo igual por el otro lado, y en ese momento volvemos a echar el resto del aliño excedente sobre el mismo.
- En el momento en que se haya horneado por igual por ámbas caras, ahora tendríamos el pollo al horno con piñalist para ser útil, cosa que vamos a hacer siempre y en todo momento y en toda situación ardiente y acompañando precisamente lo mismo con la guarnición de patatas y piña, que han de estar bien agradables, con la que vamos a tener un plato sabrísimo y que seguro llama la atención a tus comensales.
Preparación de Pollo al Horno con Piña:
- Vamos a precisaros de qué forma elaborar un pollo al horno con piña, una receta que si en algún momento probaste te va gusto. Empleando un pollo de buen tamaño vas a poder ser útil tres o 4 comensales, en tanto que acompañaremos el pollo con una guarnición de patatas para acompañar la piña.
- Si tienes un mayor número de comensales puedes elaborar 2 pollos y acrecentar las proporciones del resto de elementos precisos. Comencemos ahora con la receta pasito a pasito.
- La primera cosa que vamos a hacer va a ser dejar el pollo limpio, tanto por fuera como por la parte interior, quitándole los restos que tuviese y pasándolo por agua bajo el grifo. Una vez lo hayamos limpiado bien lo dejamos chorrear o secarlo, para lograr salpimentarlo al gusto, sin olvidar su interior. Al tiempo que lo reservamos para después mondar 2 patatas para cortarlas en rodajas para conformar la guarnición, con lo que las cortamos con un espesor de un centímetro y medio como máximo, a fin de que queden bien fabricadas.
- Las ponemos sobre una bandeja de horno, engrasada con algo de aceite de oliva, y una vez las poseemos formando una base organizada, las salamos un tanto y echamos un chorrito de aceite por arriba. Sobre ellas vamos a poner tres o 4 rodajas de piña, de este modo sea natural o piña de lata, mucho más ya que sea piña en su jugo y no en almíbar. Tenemos la posibilidad de ponerlas enteras o troceadas, cuanto mucho más nos agrade. Al final ponemos el pollo salpimentado sobre la guarnición y ponemos a precalentar el horno a doscientos grados.
- Mientras que el horno se excita hasta la temperatura deseada prepararemos un aliño para el pollo, lo que vamos a hacer batiendo en un vaso capaz para batidora los cien ml de aceite de oliva virgen, unos doscientos ml del jugo de piña de la lata, o jugo de piña si nos encontramos empleando piña natural, y aparte de esto agregamos 2 o 3 rodajas de piña. Lo batimos lo más bien que se pueda hasta dejarlo mezclado y untaremos todo el pollo con este aliño, tanto por fuera como por la parte interior, y volcamos un tanto mucho más sobre las patatas a fin de que tomen su gusto en todo el horneado
- Con el horno ahora a doscientos grados ponemos la bandeja con todos los elementos y dejamos hornear sobre unos sesenta o setenta minutos precisamente, tiempo que mudar entre un horno y otro, además de influir el tamaño del pollo usado precisamente lo mismo.
- Cocinamos hasta el día de hoy en que el pollo quede bien doradito y le ofrecemos la vuelta para dejarlo igual por el otro lado, y en ese momento volvemos a echar el resto del aliño excedente sobre el mismo.
- En el momento en que se haya horneado por igual por ámbas caras, ahora tendríamos el pollo al horno con piñalist para ser útil, cosa que vamos a hacer siempre y en todo momento y en toda situación ardiente y acompañando precisamente lo mismo con la guarnición de patatas y piña, que han de estar bien agradables, con la que vamos a tener un plato sabrísimo y que seguro llama la atención a tus comensales.
