¿Te ha dado gusto la receta? Quisiera que te hayas dado ganas de probarla. Ahora vas a ver que rico queda el arroz con aletas. Además de esto, poder comerse las aletas con las manos… ¡Es la mejor parte!
No te cortes y permíteme un comentario para contarme tu opinión sobre la receta, otras recomendaciones que poseas para cambiar la receta o para preguntarme las inquietudes que te hayan surgido sobre la preparación.
Elaboración
1. Ponemos aceite en una sartén, sartén o cazuela de fondo abultado y freímos las aletas hasta el momento en que estén bien doradas.
2. Hasta entonces, elaboramos las verduras, lavándolas y cortándolas.
Elementos
- 200 g de arroz redondo de grano corto
- 4 aletas de poronga > 1 puñado de guisantes
- ½ pimiento colorado picado
- ½ pimiento verde picado (tixagb_1″ > ½ ñora o ½ cucharada )
- ½ cucharada chica de pimentón dulce
- 2 dientes de ajo picados itemprop=»recipeIngredient»> 150 g de tomate )
- 500 ml de caldo de pollo
- Perejil fresco picado =»recipeIngredient»> 2 medidas de cuchara de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Tiras de pimiento asado (vale piquillos)
(t ixag_13) Salpimentar
Coloca la ½ ñora en un vaso y cubra con agua hirviendo. Remojar 15 minutos. Raspe la carne con una cuchara. Reservadlo.
Sacar del fuego. Deje templar medio minuto. Añadir la pimentón y combinar bien.
Añadir el arroz a la paellera, combinar bien y rehogar 2 minutos hasta el momento en que los granos de arroz se hayan vuelto un tanto translúcidos.
Moje el arroz con el caldo. Integrar asimismo el azafrán desleído. Salpimentar.
Meter las aletas en la paellera.
Añadir los guisantes.
¡Y ahora está! Ser útil enseguida. ¡Buen beneficio!
Sirve y degusta:
El arroz con pollo tienes que ser útil exactamente en el instante en que está ya listo y ardiente, con el grano de manera perfecta hecho pero no pasado, y con el caldo completamente absorbido.
Pone la paellera en el centro de la mesa con un salvamanteles debajo y reparte el arroz entre los comensales. No olvides poner en la mesa rebanadas de pan para todos los que agradan de acompañar de este modo el arroz, y asimismo limón, una práctica muy murciana y extendido asimismo a otras zonas. A mí en lo personal me chifla con un óptimo chorro de limón 😛
Sirve y degusta:
El arroz con pollo tienes que ser útil exactamente en el instante en que está ya listo y ardiente, con el grano a la perfección hecho pero no pasado, y con el caldo completamente absorbido.
Pone la paellera en el centro de la mesa con un salvamanteles debajo y reparte el arroz entre los comensales. No olvides poner en la mesa rebanadas de pan para todos los que agradan de acompañar de esta forma el arroz, y asimismo limón, una práctica muy murciana y extendido asimismo a otras zonas. A mí en lo personal me chifla con un óptimo chorrito de limón 😛